En los últimos meses, la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía (Conuee) ha presentado tres nuevas normas para mejorar tanto la calidad de las lámparas de iluminación tipo LEDs y fluorescentes, como las instalaciones eléctricas en casas y edificios con el objetivo de evitar que aparatos poco aptos operen sin funcionar correctamente o generen gastos innecesarios al comprador.
En todos ellos se busca establecer los parámetros mínimos de iluminación, resistencia y eficiencia que toda instalación debe tener y así evitar gastos innecesarios a los compradores o accidentes por sobrevoltaje o cortos circuitos.
En las lámparas fluorescentes, el proyecto ya fue dictaminado, consultado y aprobado para su uso publicación en el Diario Oficial de la Federación con la clave NOM-017-ENER/SCFI-2012 para sustituir las lámparas ineficientes y prevenir su venta en el mercado nacional.
Con su aplicación, los ahorros en un solo año serían de 1 millón 583 mil 773 pesos, equivalentes a 2 millones 462 mil megawatts-hora que no se consumirían de la red por ahorros de utilizar un mismo foco 20 años.
Esta normatividad contempla que si las lámparas existentes no cumplen con los requisitos, deben ser retiradas de los anaqueles, mientras que las que cumplen parcialmente deben tener todos los requisitos para seguirse vendiendo.
En las lámparas LED, el proyecto NOM-031-ENER planea regular el parque de 290 millones de focos que se encuentran en el País alumbrando calles y semáforos, los cuales podrían extender su vida 600 por ciento.
La normalización en esta materia abarcará las luces en cruces vehiculares, carreteras así como ciudades y áreas protegidas.
En el documento, la Conuee señala que esta medida favorecerá las condiciones de seguridad de ciertas plazas en la noche así como facilidades al apoyo vial.
El primer beneficio sería que los gobiernos municipales y estatales destinarían menos dinero para el pago de las facturas eléctricas, pues los LEDs utilizan el 4 por ciento de la energía comparada con un foco incandescente, detalla el proyecto que ahora se encuentra en etapa de discusión por parte de las empresas y particulares afectados por la norma.
Por último, el proyecto NOM-001-SEDE, para instalaciones eléctricas, actualiza la normatividad vigente para incorporar los nuevos adelantos tecnológicos a la norma al mismo tiempo que se determinan los parámetros mínimos para proteger al usuario contra choques eléctricos, los efectos térmicos, sobrecorrientes, las corrientes de falla y sobretensiones.
El Norte.